El Cazador de Elefantes Invisibles
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INTRODUCCIÓN PERSONAL
Podría estar hablando largo y tendido de este grupo de tan corta duración pero de tan amplia creación. No conocí sus exactos inicios, pero casi, y desde que los conocí pude asistir a la mayoría de sus conciertos.
Hoy, 15 de julio de 2013, he tenido una breve y deliciosa entrevista improvisada con Juamba, después de tanto tiempo... Estas cosas no me suelen salir bien; no sé por qué, cierro etapas intensas de amistad, y a la vuelta, después de cierto tiempo, soy incapaz de abrirme y ser lo expresivo que fui en aquellos entonces. El tiempo nos cambia, claro, pero esto es culpa mía, lo sé. Me ha encantado escuchar al gran músico, Juamba Aergontanúa en la época de El Cazador de Elefantes Invisibles, contarme cosas que sabía y que no sabía. Ahora viene el momento de la audición pausada, porque además de su presencia, Juamba me ha regalado material conocido y desconocido, y en estos momentos me siento muy agradecido por poder tenerlo, junto con la historia de cada CD.
Atrás, pero que muy atrás, 16 años ni más ni menos, quedan esos conciertos anunciados con carteles de fotocopia en blanco y negro, intimistas, en locales sevillanos, a menudo La Carbonería, con escenografía de jaulas, caretas y cirios y con presentación en diapositivas (diapositivas de verdad) de Gonzalo, el bajista. Eran conciertos con sólo voz, guitarra acústica y bajo; aunque al final pude ver algunos con el añadido del chelo.
Cuando, no más allá del 2009, me topé felizmente con Falso Cabaret, muchas cosas habían cambiado: el sonido era más eléctrico y la voz de Juamba más grave; los temas de tendencia distinta en su contenido y existía un batería. Pero el estilo básico de componer las canciones y de tocar la guitarra era prácticamente el mismo, y eso fue muy reconfortante: lo reconocí de inmediato. Este creador y músico evoluciona, y el "Perro Amor" de su actual Lõbison difiere ya bastante de El Cazador de Elafantes Invisibles. Pero conviene que no se olvide a este grupo, por si alguna vez tenemos la suerte de que se publique su tan extraordinario trabajo. Nunca se sabe.
EL GRUPO
El Cazador de Elefantes Invisibles fue un dueto sevillano en activo desde el año de 1994 hasta 1996, aproximadamente. Dos años de intensa creatividad y conciertos por locales de la ciudad de Sevilla y otros municipios. Y no sólo locales, sino asimismo diversos foros, como determinados eventos realizados en la ciudad u organizados por grupos creativos de la Universidad de Sevilla.
Componentes:
Juamba Aergontanúa (ahora Juamba D'Estrosso), compositor de música y letras (con alguna pequeña excepción), guitarrista y voz; en las grabaciones, además, teclados y percusión eventual.
Gonzalo Ruiz, bajista, con alguna otra intervención eventual en la grabación de algún tema; también era fotógrafo creativo y sus imágenes se proyectaban en los conciertos.
ESTILO
En ningún modo debe clasificarse su música como de cantautor, por más que muchas de sus canciones sean reivindicativas y el peso de los temas recaiga sobre Juamba. El estilo de este grupo era complicado de definir en su momento y lo sigue siendo hoy; en los carteles que anunciaban sus conciertos aparecía como Folk Anónimo, pero no desde el principio y esta etiqueta autoimpuesta por el grupo tenía más de creativa e intrigante que de definición, pues aunque en su última etapa se deja influir por el folk cántabro, su estilo musical no es en ningún modo lo que podríamos considerar folk.
Hemos comenzado con una negación porque era un comentario bastante grueso que se oía de algunos oyentes primerizos y con el oído poco fino. Claro que la voz sincera de Juamba, el hecho de que el instrumento principal fuera la guitarra acústica, que no eléctrica, que en muchos momentos adoptaba la función rítmica a base de acordes que se iban a lo agudo en otras, dejando al bajo el primer plano melódico, podía aproximarlo a este estilo en una audición descuidada.
En los conciertos, como hemos dicho, el protagonista era la voz, de un lado, y la conjunción guitarra acústica-bajo, de otro. La guitarra puntea a veces, pero pocas, generalmente son acordes controlados en intensidad y volumen muy conjuntado con un bajo de cinco cuerdas que añadía en muchas ocasiones efecto de pedal muy suave, acolchado; tanto un instrumento como otro gustaba de combinar graves con agudos, parte baja y alta del mástil, y a medida que evoluciona el grupo la guitarra afianza su particular y definido estilo y el bajo mejora cobrando más protagonismo. Debemos seguir destacando su conjunción; en cualquier caso no se reparten roles de protagonismo, asumiendo ritmo y melodía en conjunto o alternativamente.
El concierto, en todos sus aspectos, creaba una atmósfera al público reunido en la oscuridad, que tomaba sus copas y charlaba; muchas de esas charlas eran creativas, poéticas, auténticas tertulias de dibujantes y escritores. Se ponía en escena un sencillo decorado con sábanas, jaulas pequeñas, caretas y cirios grandes encendidos detrás y alrededor. Los músicos tocaban sentados y generalmente muy juntos y el público, también sentado, solía rodearlos en semicírculo. Durante el concierto se proyectaban diapositivas (fotografías de Gonzalo Ruiz) acordes con las canciones que se interpretaban.
En las grabaciones se introducían teclados y percusiones ocasionales, aunque en su última etapa aparecía en directo un chelista, José Manuel Fernández, y contaban ya con la participación de Raúl Fernández "El Chino", percusionista.
Las letras son muy elaboradas, con frases muy medidas y selección léxica y combinación entre vocablos bastante personal y característica. La evolución musical interna de cada tema se caracteriza por buscar un clímax con fin o descenso (muchos temas van in crescendo en intensidad, desde la calma hasta el punto álgido de volumen y velocidad y se quedan ahí, o bien bajan de nuevo a la calma) o mantienen una intensidad constante, dependiendo del carácter y contenido de la canción.
A nivel gráfico para carteles y portadas contaron con el apoyo del grupo de Artes Plásticas y Literatura OBSESIÓN, especialmente de Patricio Mazorra y Óscar Lasheras.
FASES Y TEMAS
El Cazador de Elefantes Invisibles no tuvo la fortuna de ser fichado por ningún sello discográfico y sus grabaciones no son nada fáciles de encontrar. En todo momento se movían con una maqueta, que conjuntaba dos estilos de canción diferentes. Esta maqueta es hoy una rareza. Nosotros hablaremos de tres "trabajos", que representan tres momentos diferenciados en el tipo de letra y evolución musical, que bien podrían haberse constituido en tres LP's o tres CD's distintos. Los dos primeros constituyen la maqueta (la mayoría de las canciones) volcadas en el formato de cinta, y el último fue un proyecto que se grabó con más cuidado y que estuvo en ciernes, pero que no apareció porque se disolvió el grupo un poco antes de que se hiciera realidad. A estos tres trabajos hay que añadir, además, la BSO, no de una película, sino del libreto creativo Metamorphosis, del grupo creativo OBSESIÓN, del que luego hablaremos, y conciertos; también de una última sesión, un cuarto trabajo nonato, o quasinato, que pertenece al mismo momento que el tercero.
Trabajos Principales
PRIMER TRABAJO: RAZÓN.
Vamos a considerar estos temas los primeros, si bien cronológicamente no podemos estar seguros con respecto al Segundo Trabajo, desde luego pueden tomarse creativa y musicalmente como el principio del grupo (e incluso cronológicamente con cierto margen de error, como hemos dicho). Se caracterizan estos temas por ser en su mayoría reivindicativos, volcándose en la denuncia de injusticias sociales e históricas diversas, como la inmigración (De un continente ilegal), pueblos oprimidos (Donde se ahoga el sol, Nos sostiene la razón) o apunta a la anestesia moral del individuo occidental (No hay anarquía de identidad). No obstante, hay algún tema más intimista y de descripción bella, de transmisión de visión de un paisaje con significado o de desnudo interior, anticipando o enlazándose con el segundo trabajo y la ulterior búsqueda de sensaciones e impresiones del tercero (el caso más característico, Corazón del mar).
Temas:
1. De un continente ilegal.
2. Donde se ahoga el sol.
3. La ira.
4. Nos sostiene la razón.
5. Corazón de mar.
6. No hay anarquía de identidad.
7. Con el alma se desnudan.
SEGUNDO TRABAJO: EL CAZADOR DE ELEFANTES INVISIBLES.
Si en Razón se apela a lo social (pero siempre desde un prisma humano), en El Cazador de Elefantes Invisibles habrá reivindicaciones de índole personal, existencial: se alude a las inercias personales, al pensamiento del hombre corriente o del marginado. En ocasiones las letras se hacen bastante difíciles y conceptistas (El Cazador de Elefantes Invisibles, Absoluta-mente), pues se dan alusiones, referencias, metáforas y construcciones fraseológicas muy peculiares, en algún momento algo enrevesadas. Este barroquismo en los dos temas aludidos se observa también un poco en la música, con caídas y sonidos más complejos, y con un mayor uso de los silencios que en el primer trabajo. El resto de temas, no obstante, no presenta tal complejidad comprensiva, y están en la misma línea constructiva del primer trabajo.
Temas:
1. El Cazador de Elefantes Invisibles.
2. El intérprete de la fantasía y la risa.
3. Absoluta-mente.
4. Como un perro herido.
5. Sentí un momento sencillo de melancolía.
6. Asilo.
A ellos se le podría añadir la hermosa versión musical que hacen del poema de Luis Cernuda, Donde habite el olvido, remarcando así el carácter más poético (íntimo, personal) de este segundo trabajo.
TERCER TRABAJO: RESPIRAS Y VUELVES A VIVIR
Este es el último trabajo de El Cazador de Elefantes Invisibles, sin duda el mejor en todos los aspectos, y muestra clara de la madurez musical a la que habían llegado. En los conciertos, con la inserción de estos temas nuevos, el espéctaculo tenía un nombre: AMAIA.
Técnicamente, los temas están mejor tocados y son más elaborados. Conceptualmente, lo instrumental se impone a lo vocal aún más. Las letras, más cortas y aparentemente sencillas, se vuelcan alguna vez sobre una palabra o varias que se recalcan, con más poder evocador, ya que estos temas buscan ahora, siquiera a modo de tentativa, la transmisión de sensaciones (podemos decir que aquí comienza el "estudio" de este factor). Tienen, como novedad, una consciente influencia del folk cántabro, que no sólo se refleja en la música, sino asimismo en la letra, cerrando vocales finales (amigu, cantu, ...), artículo ante posesivo (con la mía cantiga) y otras delicias filológicas. En algunos temas se percibe, no sabemos esta vez si consciente o inconscientemente, algún que otro saborcillo arabesco.
Instrumentalmente, cuentan con un chelo y percusión.
Temas:
1. Con la mía cantiga.
2. Mi mirada está sola.
3. Infinito oscuro respiras.
4. La niña mujer la hembra.
5. Las aguas del lago.
6. Promesas en mi tierra.
7. Tristana.
8. Existir!
LA ÚLTIMA SESIÓN (¿EL CUARTO TRABAJO?)
Pergeñando un nuevo proyecto, esta vez sí con las sensaciones como protagonistas en las letras y con la mirada puesta en la música urbana, queda bocetada la Última Sesión. Queda como una especie de estudio o borrador de un futuro proyecto que se aborta por la repentina disolución del grupo. Escuchar estos temas con la luz apagada y muy bajo, a ser posible de noche, es una experiencia reconfortante.
Temas:
1. Agua bonita de mar.
2. Ya duerme en el bosque la luna.
3. Sal Sara.
4. Sueño sin soñar.
5. Hábitos de convicción.
6. La pose.
7. Bienvenido don Tomás.
8. Trivial show.
METAMORPHOSIS
Antes del Tercer Trabajo, el grupo compuso la música para un libreto creativo, Metamorphosis, reflejo de una antigua ambición siempre moderna: la fusión de las artes. El grupo de Artes Plásticas y Literatura de las Escuelas Técnicas de Ingeniería Industrial y de Arquitectura (peritos y aparejadores les llamaban), y más tarde también de la Facultad de Geografía e Historia, OBSESIÓN, creo artesanalmente un libreto bastante grueso con un relato entreverado con poesía basado en una visión artística de la biografía de Lord Byron, con anacronismos intencionados. Además de los textos, contenía dibujos y fotografías originales (pegadas a mano sobre el papel verjurado) e incluía en su caja una cinta donde se escuchaban los títulos, algunos fragmentos y la música de El Cazador de Elfantes Invisibles). Este libreto se presentó en representaciones teatrales y otros actos.
Esta BSO es, en su mayor parte, instrumental.
Foto de J. A. Bolaños Luque. El resto, de www.bancodeimagenesgratis.com
Temas
1. Muchedumbre.
2. Nobleza real-izadísima.
3. Encuentro.
4. Despedida en Venecia.
5. Al divorciado osado.
6. Con Sade.
7. El genio embotellado.
8. Carta a Gala.
9. Lazarapavagana.
10. Antártida.
11. Allegra.
12. Extrañó su existencia.
13. Desastre natural.
14. Mortal.
15. Helesponto.
16. ¿Te llamas ilusión?
17. Antártida II.
18. Creaste tu propio monstruo.
19. Nuestro incesto, Augusta.